Un modelo novedoso para sobreponerse a las pujas de poder y lograr que un conjunto de personas sobresalientes aporten lo mejor de cada uno en la ejecución de los planes de la empresa.
Suele decirse: “Donde manda capitán no manda marinero”, pero ¿siempre sabemos con total seguridad quién es el capitán? ¿Y estamos de acuerdo en por qué es él, y no su hermana, o su sobrino?
Estas preguntas son muchas veces angustiosas en las empresas de familia. Quizás haya varias personas que ejerzan, en la práctica, un liderazgo enriquecedor, pero a la hora de definir quién debe ser el gerente general se empantanan en discusiones teñidas por los celos, la competencia destructiva, y, muchas veces, por la negación de las capacidades de los otros.
Por eso, en los últimos tiempos viene desarrollándose un concepto enriquecedor: el de Gerencia General Colaborativa.
La Gerencia General Colaborativa es un paso más hacia la complementación en los espacios de liderazgo en una empresa, y tiene su antecedente inmediato en el Comité de Dirección. En efecto, en muchas empresas, después de un largo aprendizaje, las decisiones estratégicas se toman en equipo. Si bien la Ley de Sociedades se refiere al Directorio, en la práctica denominamos a ese equipo Comité de Dirección, porque no siempre es necesario formar parte de un Directorio legal para estar en el equipo que toma decisiones.
Pensar en una Gerencia General Colaborativa es dar un paso más en el sentido del aporte de valor en equipo, ya que, en tanto el Comité de Dirección se reúne alrededor de una mesa en momentos previamente establecidos, y para debatir temas que forman parte de una agenda, la Gerencia General Colaborativa interviene en el día a día de la empresa, y muchas veces para resolver contingencias, es decir, situaciones que no estaban específicamente previstas.
¿Cuáles son las reglas para el funcionamiento exitoso de una Gerencia General Colaborativa?
- Se aplica lo decidido en las reuniones.
- Se establecen pautas para el debate y la toma de decisiones (cuál es el quorum para debatir, cómo se convoca a las reuniones, cómo se comunica lo decidido a quienes no pudieron participar, cómo se divide entre lo que no admite demora y lo que puede esperar hasta que haya asistencia plena, etcétera).
- Si se plantea una contingencia o la necesidad de un cambio respecto de lo previamente acordado se realiza una reunión de urgencia, por lo menos con los presentes.
- Todas las decisiones deben atenerse a los lineamientos estratégicos definidos por el Comité de Dirección.
- Los integrantes de la Gerencia General Colaborativa pueden dividir sus áreas de incumbencia.
- Eventualmente, puede designarse a un coordinador con fecha de finalización de sus funciones, precisamente para evitar la tentación de alguno de convertirse en Gerente General unipersonal.
Un caso para conocer
Carlos Andretich S.A., una prestigiosa distribuidora de accesorios para vehículos con sede en Rafaela, ha implementado exitosamente una Gerencia General Colaborativa, a la que desde ahora denominaremos GGC, como modelo para la transición hacia la Tercera Generación.
La empresa fue fundada por Carlos Alberto Andretich y su esposa Virginia, y ha crecido considerablemente hasta convertirse en una referente en el mercado.
De izquierda a derecha, de arriba hacia abajo: Cecilia Saracco, Ignacio Campodónico, Nicolás Campos, Mauro Pinery, Santiago y Matías Andretich / Foto gentileza de Carlos Andretich S.A.
Los hijos del matrimonio, Marcelo, Diego, Gabriela (muchas veces representada por su esposo, Lucio Guntern), Patricia y Natalia Andretich forman parte, actualmente, del Comité de Dirección de la empresa, pero, siguiendo la huella del fundador, ellos han entendido que dar paso a la Tercera Generación, cuando todavía son jóvenes, es una manera de preservar una empresa que requiere actualización permanente y mucha energía para un gerenciamiento exitoso.
A su vez, los integrantes de la Tercera Generación que se encuentran en puestos de relevancia, Matías y Santiago Andretich, consideran que es necesario unir la práctica y el saber de no familiares al compromiso propio de la pertenencia a la familia, porque sumando el talento de unos y otros es posible mantener a la empresa con un alto nivel de motivación y de rendimiento profesional.
La Gerencia General Colaborativa ha consensuado con el Comité de Dirección los temas de incumbencia propios, y los que deben ser debatidos y decididos en conjunto.
Los temas propios son los siguientes:
- Elaboración de indicadores, para mantener actualizados a los accionistas y al Comité de Dirección respecto de la marcha de los negocios
- Comunicaciones al personal
- Análisis de conductas no toleradas
- Designación de mandos medios
- Cuáles son las incumbencias de cada puesto
A su vez, los temas que se consensuan con el Comité de Dirección, son los siguientes:
- Incorporación de líneas o marcas
- Rescisión de relaciones estratégicas
- Endeudamiento extraordinario
- Desvinculaciones de personal con antigüedad
- Análisis de viabilidad de nuevos negocios
- Contratación/desvinculación de miembros de la familia
- Temas estratégicos: cambio en la estructura edilicia, fusiones, adquisiciones
- Ingreso, permanencia y egreso de miembros de la familia
- Temas financieros de largo plazo
El objetivo es el crecimiento del Grupo empresario-familiar, y que el hecho de ser familiar no quite incentivos para el compromiso y la participación de los no familiares.
Al romper con la lógica de la Gerencia General Unipersonal, Carlos Andretich S.A. realiza una experiencia valiosa que seguramente va a ayudar a la cohesión de talentos diferentes para un fin compartido.