Dado que las situaciones de crisis son generadas por factores imponderables o imprevistos, normalmente se presentan dificultades para su evaluación y, consecuentemente, tanto para la elaboración de diagnósticos precisos y completos, como para la adopción de decisiones oportunas y adecuadas.
Habitualmente, estas situaciones -tensas, dinámicas e inciertas- son agravadas por la convergencia de datos contradictorios e imprecisos; por la intensidad de las distintas presiones externas e internas; y en ocasiones por la persistencia de las demandas periodísticas de los medios de prensa.
Es dable advertir que las características de estas contingencias plantean la necesidad de disponer de un conjunto de previsiones que oriente y facilite la adopción de decisiones eficaces durante las mismas a fin de minimizar las contingencias de la situación.
Prevenir una crisis requiere dedicación y tiempo. Es esperable que en tiempo de paz las empresas anticipen los escenarios potenciales, elaboren los planes de prevención de riesgos y manejo de crisis, diseñen y operen simulacros para evaluar los procedimientos y realizar por supuestos capacitación sobre como enfrentar a los medios (media training).
Ahora estamos en ‘tiempos de guerra’. El corona virus nos afecta a todos por igual, por lo que independientemente de acciones que tomen a nivel RRHH para prevenir su contagio como son el home office, postergar viajes y eventos, mantener distancias prudentes, limpiar bien los puestos de trabajo, concientizar al personal respecto a las mejores medidas de higiene personal (¿cómo lavarse las manos?; ¿cómo hay que toser?, etc), las compañías deben trabajar en 3 programas específicos de forma inmediata:
1) Principales necesidades de información inicial (¿qué es el corona virus?; ¿cómo se propagó?; ¿quiénes son las personas de mayor riesgo?, etc).
2) Probables requerimientos internos y externos de información (¿qué va a hacer la empresa en esta situación?; ¿cómo va a afectar ello el trabajo?; ¿tiene la empresa algún afectado?, etc).
3) Principales factores de análisis (¿hay personal o familiares del personal que hayan viajado recientemente al exterior?; ¿cómo evoluciona el virus en el país, provincia, en la que estoy presente?; ¿qué medidas está tomando el gobierno nacional / provincial / municipal para evitar el contagio?; ¿a dónde debemos llamar ante un eventual contagio?; etc.)
Asimismo, por medio de las Medidas de Coordinación se deben establecer las disposiciones comunes para la adecuada conducción general de las actividades previstas para una situación de estas características. Algunas de estas disposiciones son las que se mencionan a continuación:
- Asignación de responsabilidades adicionales
- Relaciones de dependencia transitorias
- Órganos y mecanismos de control
- Centros de comunicación e información
- Convenios y acuerdos
- Modalidades de supervisión y evaluación
- Listados de los números telefónicos de emergencia
Ante una situación así hay que actuar. La mejor forma de no tener una crisis es prevenirla.
Máximo Crespo, Socio de HRC.